Por
Alguien Conspira
Oculte el
rostro…
La tarde
aquella en que fuimos exiliados,
Por la
indiferente mirada del monopolio
De la risa
consumida por autómatas cerrados.
Al acecho en
la historia, el tirano,
Ronda con
sus perros las esquinas,
Vigila los
cuerpos, limita la vida.
En las
trincheras se acicala el miedo,
En el fuego
de ancestrales guerreros
La mirada
fija en la bala progresista.
Cañones
libertarios, incendiarias utopías
Con la
capucha cómplice implacable en la fiesta
De la
autonomía.
Clandestinidades
entre sombras,
Protagonista
anónima de paganas acciones,
Las llamas
iluminan los templos sagrados
Prisiones
del Estado.
Sin rostro…
silueta militante del amor y la anarquía
En el
vientre el fuego inagotable de la pasión combativa
Carcomida
por la banal palabra de carroñeros serviles de la ética esclava.
Sin
rastro... para que estos versos sean balas de libertad
No dagas de
vanidad.
Sin huella…
ni punto fijo en el espaciotiempo
Solo actos
humildes desobedientes al amo.
Hasta la
victoria, rompiendo los grilletes mentales
Que
encadenan el deseo, en cada batalla asegurando
La
estrategia y sus contradicciones.
Venceremos
para que el futuro sea para nuestros nietos
La siembre
de la armonía libertaria,
Derrocado
todo autoritarismo.
El fuego,
renovara las estructuras físicas que nos limitan,
Descomponiendo
la basura mercantil
Placebo del
orgasmo erótico, simulacro de libertad.
Con los
negados, tejiendo lazos de hermandad
Camaradería
amorosa de los que delatan la hipócrita codicia
Del que
envidia la desnudez de la palabra.
Hasta la
muerte, carcajada irónica
Sarcasmo a
la norma instituida,
Imágenes,
espejismos cegadores, formas sin fondo
Cuerpos
desprovistos, maleantes que acosan los sueños…